Según el empresario Aldo Vendramin, la cadena logística de los alimentos orgánicos ha experimentado transformaciones significativas en las últimas décadas, impulsadas por la creciente demanda de productos más saludables y sostenibles. A diferencia de los sistemas convencionales, que a menudo implican trayectos largos y múltiples etapas entre la producción y el consumo, los alimentos orgánicos tienden a circular en circuitos más cortos y directos.
Descubre cómo el recorrido más corto y eficiente de los alimentos orgánicos está revolucionando el camino del campo hasta tu mesa —y por qué esto lo cambia todo para productores y consumidores.
¿En qué se diferencia la cadena logística de los alimentos orgánicos de la convencional?
La cadena logística de los alimentos orgánicos se caracteriza por trayectos más cortos y relaciones más directas entre productores y consumidores. Esto ocurre porque muchos de estos alimentos se producen localmente o en regiones cercanas a los centros urbanos, lo que permite reducir la dependencia de grandes distribuidores e intermediarios. Así, la estructura logística se vuelve más simple, lo que mejora la eficiencia del proceso y reduce los costes operativos.

Otro factor importante es que los alimentos orgánicos requieren mayor cuidado en su almacenamiento y transporte, ya que no utilizan conservantes químicos. Esta característica exige una logística adaptada, con plazos más cortos y sistemas de entrega más ágiles. Esto fomenta la creación de redes logísticas específicas para productos orgánicos, como cooperativas, mercados locales, entregas por suscripción y plataformas digitales especializadas.
Además, Aldo Vendramin destaca que la trazabilidad es un diferencial de la cadena logística de los alimentos orgánicos. Como los consumidores valoran el origen de los productos, muchos productores invierten en sistemas que garantizan la transparencia desde el campo hasta la mesa. Esto incluye etiquetas con códigos QR, certificaciones visibles y canales de comunicación directos con los consumidores, promoviendo una relación más cercana y confiable.
¿Cuáles son los beneficios económicos y medioambientales del acortamiento logístico?
Según el empresario Aldo Vendramin, la reducción de la distancia entre la producción y el consumo aporta beneficios directos para la sostenibilidad medioambiental. Menos kilómetros recorridos significan menos emisiones de CO₂, menor uso de combustibles fósiles y un impacto más reducido en el tráfico urbano. Además, un transporte más corto disminuye el desperdicio de alimentos, ya que los productos frescos y sin conservantes tienen más posibilidades de llegar al consumidor en buenas condiciones.
Desde el punto de vista económico, el acortamiento logístico permite que el productor retenga una mayor parte del valor final del producto, eliminando intermediarios y aumentando su margen de beneficio. Al mismo tiempo, el consumidor paga un precio más justo, sin los recargos típicos de las grandes cadenas de distribución. Esto fortalece los circuitos cortos de comercialización, como ferias, mercados locales y programas de entrega directa.
¿Cómo ha contribuido la tecnología a la logística de los alimentos orgánicos?
La tecnología ha desempeñado un papel decisivo en la optimización de la cadena logística de los alimentos orgánicos. Plataformas digitales de marketplace, aplicaciones de entrega y sistemas de seguimiento han facilitado la conexión entre productores y consumidores, reduciendo las barreras de entrada para pequeños agricultores. Con estas herramientas, es posible ofrecer productos frescos con una logística eficiente y a escala creciente.
Además, el uso de software de gestión agrícola permite a los productores orgánicos planificar mejor sus cosechas, alineando la oferta y la demanda de forma más precisa. Esto evita excesos o carencias de productos, optimiza la logística y garantiza mayor eficiencia en el transporte. Muchos productores también utilizan sistemas de gestión de inventarios y rutas inteligentes, lo que reduce costes y mejora los plazos de entrega.
Por último, otra innovación es el uso de tecnologías orientadas a la trazabilidad, como blockchain y etiquetas inteligentes, que garantizan la autenticidad y el origen de los alimentos orgánicos. Según Aldo Vendramin, estos recursos aumentan la confianza de los consumidores y hacen que la logística sea más transparente y segura, además de facilitar el cumplimiento de requisitos regulatorios y de certificación.
Autor: Janice Wagner